Los riesgos del Greenwash ilustrados por Volkswagen
Mientras los consumidores estábamos atentos a los constantes lanzamientos de coches eléctricos, híbridos o que aplican otras tecnologías menos contaminantes con la esperanza de mejorar el ambiente, las autoridades estadounidenses destaparon el escándalo del fraude ambiental de VW.
Escándalo que no quisiera que perdiera fuerza en las noticias, pues la hipocresía con que hicieron greenwash y se beneficiaron simulando ser amigables con el ambiente, merece nuestra condena como consumidores, con el pequeño gran poder que tenemos, no comprando sus autos, con eso mandaríamos el mensaje claro y contundente a esa empresa y a todas las demás.
VW dice que “sus clientes son lo primero”, pero los engañaron deliberadamente, se presentaron como una compañía defensora del ambiente, y contaminaron afectando a sus clientes y también a los que no lo son. Porqué tendríamos que volver a creerles? Ni siquiera están muy colaborativos con las autoridades!
Igualmente podemos ver las pérdidas que la empresa está afrontando y preguntarnos si vale la pena ese riesgo absurdo para obtener ganancias haciendo las cosas mal. Muy caro le va a costar. Decenas de miles de millones de dólares que podían haberse empleado en desarrollar autos realmente más ecológicos. Es realmente absurdo!
Las últimas novedades son que el BEI, Banco Europeo de Inversiones, ha decidido no conceder más préstamos a VW, al no poder descartar que un crédito concedido en 2009 no esté de alguna manera relacionado al fraude ambiental.
Y en USA, fue presentada una demanda civil por el Departamento de Justicia en un tribunal federal de Detroit (Michigan), en nombre de la Agencia de Protección Medioambiental (EPA), acusando a la compañía alemana de violar la Ley de Aire Limpio norteamericana. Aunque se trata de una acción civil, no se cierra la puerta tampoco a que se pidan posibles responsabilidades penales en el futuro a los culpables del escándalo. El asistente del fiscal general para la División de Recursos Naturales y el Departamento de Medio Ambiente, John C. Cruden, quiso dejar muy claro que esta demanda es un aviso al resto del sector.
Pero aún quedan muchas preguntas por hacer y estar atentos a las respuestas, por ejemplo alguien va a ir preso por esto? O al igual que muchos ejecutivos americanos, con cuota de responsabilidad en la crisis financiera, se irán a sus casas “despedidos” con una carta de agradecimiento y un bono de millones en el bolsillo?
O preguntar dónde estaban los reguladores y controladores de (ya no digamos todos los países…) Europa? Y los alemanes especialmente? Alguien ha sido castigado por no cumplir con sus obligaciones laborales?
Si no fuera por los criticados americanos, el resto del mundo “comemos moscas” mientras VW lucra fraudulentamente, mientras groseros manejos como el de la FIFA, (y del cual todos sabíamos), campean imperturbados.
Esperemos que los gobiernos noten el riesgo y se tomen más en serio su responsabilidad de controlar a las empresas que son públicas y/o aquellas que son emblemáticas o representativas de su propio país, ya sea VW en Alemania, Petrobrás en Brasil o Ancap en Uruguay.