Filosofía y física
En este preciso momento estamos en pleno proceso para la certificación en responsabilidad social de una Universidad bajo la norma WORLDCOB-CSR: 2011.3.
La norma está pensada para las empresas y si bien sus requisitos son bastante generales se presentan algunas diferencias entre la RSE y la RSU.
De alguna manera son temas que están aún en discusión filosófica y eso significa que como organización debemos fijar una posición. Pero a veces más interesante que la posición final definida es el proceso y las preguntas que surgen:
¿Es posible plantearse cualquier tipo de responsabilidad corporativa o institucional si ésta no se basa en personas con responsabilidad?
¿Quiénes son los responsables de la formación de las personas y su desarrollo en ciudadanos conscientes y críticos?
a) ¿La familia?
b) ¿La religión?
c) La escuela, el liceo… ¿la universidad?
d) ¿Todas las anteriores?
¿Se debe transmitir una ética en particular?, ¿un paquete de valores llave en mano y listo para usar? o se debe generar el espacio de pensamiento crítico para que cada individuo desarrolle sus propios y personales valores? Y por supuesto asegurar el marco de respeto y la tolerancia.
Pero como el tema es muy amplio y las Universidades son la razón del análisis de hoy, podemos enfocar las preguntas hacia ellas.
¿Nuestras universidades, en su funcionamiento diario, forman realmente a profesionales ciudadanos responsables, conscientes de su rol y capaces de liderar cambios positivos de su país o más bien a profesionales egocéntricos, acostumbrados a relaciones jerárquicas y que entienden a la vida común en términos de lucha y ambición?
Pero la RSU implica además un espacio de reflexión, análisis e innovación en el seno de la misma universidad, cuestionándose su rol frente a la sociedad.
Los ejes del compromiso social de las universidades se estructuraron tradicionalmente en lo discursivo en la docencia de carácter “profesionalizante”, la investigación de tipo catedrática y social y la extensión orientada a transferir saberes a la población no cubierta por la universidad. Este compromiso es reforzado en la lógica autonómica y el financiamiento público que facilitaba una conciencia crítica y un rol político – social de sus diversos estamentos.
Desde nuestro punto de vista empresarial, podemos decir que la Universidad actúa de acuerdo a la RSE si en sus actividades como organización tiene en cuenta los requisitos de la norma.
Por sentido común podemos además encontrar un punto de mucho interés que es la formación de profesionales socialmente responsables. Profesionales que ingresen al mercado laboral con una formación en sostenibilidad y como ciudadanos responsables, conscientes de su privilegio, de su rol y responsabilidad.
WORLDCOB apoya el Pacto Global de naciones Unidas y promueve los “Principios para la Educación en Gestión Responsable” (PRME) que proveen un marco para que las instituciones académicas promuevan ampliamente la causa de la responsabilidad social empresarial e incorporen valores universales en los planes de estudio y en la investigación.
PRME es una plataforma de participación voluntaria para las escuelas de negocios e instituciones relacionadas con la educación en gestión. Al adherir a PRME la Institución Educativa expresa su compromiso y convicción de integrar los valores universales en el currículo y la investigación, con el objetivo de contribuir al mercado global y a la construcción de sociedades más prosperas.
En mi experiencia personal creo recordar que en mis largos años de educación tuve apenas un par de años lectivos Filosofía como materia y uno solo de Civismo y ciudadanía.
Hoy día pienso en que es muy poco tiempo dedicado a pensar los verdaderos grandes temas que hacen al ser humano,… eso y a la Física, pero ese ya es otro tema.